La verdadera felicidad no esta en las riquezas, afanarnos en ella solo trae dolor, tristeza problemas. La riqueza puede comprar una casa pero no una familia, un hogar, puede comprar un reloj pero no el tiempo, puede comprar una cama pero no el sueño, puede comprar un libro pero no el conocimiento, puede pagar un medico pero no la salud, puede comprar una posición pero no el respeto, puede comprar la sangre pero no la vida, puede comprar sexo pero no el amor.
La verdadera felicidad está en la busqueda sincera y legítima de aquel que es en sí la felicidad, la verdadera felicidad está en el encuentro personal y definitivo con Jesucristo. ¿Oís esta maravillosa música? pues fué compuesta por y para Jesucristo, es la primera parte del Oratorio de Navidad y ¿Sabeis que cantan?
Jauchzet,frohlocket,auf,preiset die tage,
Rühmet,was heute der Höchste getan!
Lasset das Zagen,verbannet die Klage
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¿Regocijaos,cantad de alegría!¡Alabad estos días!
¡Glorificad lo que el Altísimo ha realizado en este día!
Abandonad vuestros temores,cesad en vuestros llantos
Pues que el año nuevo nos traiga las luces para eso, abandonad nuestros temores y cesad en nuestros llantos y así podamos descubrir esa felicidad que no pasa factura ¿Vale la pena el esfuerzo!
Que Jesucristo y la Santisima Virgen con San José, os guarde a todos y a vuestras familias.
Uno que piensa demasiado
Dimas
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